Buscar este blog

sábado, 7 de abril de 2012

Fui camarera de un copetín al paso



En el fondo del avión se encuentran la cocina y los baños. Parados frente a una toilette ocupada, el rabino Jorge, ex capitán del ejército israelí y médico veterinario, me contó, entre otras cosas, que pasó 15 horas en el aeropuerto de Córdoba a bordo de un avión de Alitalia.
Junto a nosotros había una mesita con agua, pepsi light y algunos vasos. La gente los tomaba y se servía. Pero yo les interrumpía el paso: los espacios en los aviones son increíblemente pequeños. Así fue como puse un bar, o un copetín al paso, o un café-concert. Se llama Fusion Lounge Alitalia. 
En mi inventario había: botellas abiertas de agua San Benedetto oligominerale naturale, una o dos pepsi, y una pila de vasos de plástico transparente.
En un momento, por algún motivo que no recuerdo (debo aclarar que no bebo ni me drogo), me descubrí entonando una canción una canción argentino judía (género neo-pop fusion). Fue un show ofrecido por Alitalia, a cambio de la concesión del bar.






No hay comentarios: